La investigación científica en Enfermería y
su posterior publicación en algunos países es casi nula, no es una práctica
habitual y la República Argentina no está al margen de esta problemática.
La Enfermería ha tardado quizás más de la
cuenta en ingresar a los postulados del pensamiento científico; los
antecedentes de las primeras publicaciones periódicas en enfermería registrados
son escasos y es difícil buscar datos de las primeras publicaciones. La evolución de la propia disciplina daría lugar al
mayor crecimiento de publicaciones de enfermería gracias a la entrada de la
carrera en diferentes Universidades en casi todos los países del Mundo; pero no
es así.
La investigación científica tiene como objetivo básico y fundamental la solución de problemas concretos e importantes de la práctica diaria, en este caso, la solución de problemas en el cuidado de la salud de nuestros pacientes. Estos problemas a los cuales hago referencia se evalúan a partir de su impacto en la morbimortalidad de nuestros pacientes y el bienestar común de la comunidad, hablando en términos de salud. Obviamente los problemas de salud más importantes, desde la perspectiva de su prevalencia o por la severidad, son lo que dañan la integridad física, psicológica o social de nuestros pacientes y a esos deberíamos enfocarnos.
Los proyectos de investigación en Enfermería
deberían poner cada más énfasis y priorizar problemas relevantes del ámbito de
la salud, lo cual le daría un carácter integrador a la actividad investigativa,
ya que no estaríamos a contramano del resto de las investigaciones que realizan
otras especialidades en salud e incrementaríamos la evidencia científica propia
de Enfermería.
Buscando
causas del porque es tan baja la producción científica de Enfermería en
Argentina, encuentro rápidamente dos grupos de dificultades, o al menos, los
dos que más he escuchado.
El
primer grupo está constituido por la falta de tiempo e interés en llevar
adelante proyectos de investigación. ¿Será que muchos de ellos no le encuentran
el sentido a la evidencia científica que generan sus resultados?. Quizás no se
han dado cuenta que con los resultados de las investigaciones se modifican
conductas en base a la evidencia que generan y esto puede contribuir a
disminuir el tiempo de recuperación de nuestros pacientes o hasta quizás, por
que no, salvarles la vida.
Autores
como Hunt (1987) afirmaban que ¨… las enfermeras no entienden la investigación,
no creen en los resultados de investigación, no saben cómo aplicarlos y no
están autorizadas para hacerlo¨; a la luz de la cantidad de publicaciones que
genera Enfermería casi que se nos podría ocurrir que tuvo razón … pero no … de
ninguna manera, porque una gran mayoría del Colectivo Enfermería si entendemos la investigación, si creemos en
los resultados de investigación, si sabemos cómo aplicarlos y desde ya que
estamos autorizados para hacerlo dentro del marco de nuestras incumbencias.
La
escasa producción científica genera una escasa utilización de la evidencia
científica y no sólo en Argentina sino en otros países del Mundo que gracias a
una investigación podemos mencionar. El estudio al que hago referencia se
realizó en Australia, Retsas (2000) y logró identificar las barreras más
significativas para no usar la evidencia en orden de prioridad: insuficiente
tiempo de las enfermeras para implementar nuevas ideas en su trabajo,
insuficiente tiempo para leer investigaciones, organizaciones que no entregan
las estructuras necesarias para aplicar las evidencias, seguido por la
dificultad que presentan las enfermeras para comprender las estadísticas,
sensación de aislamiento de las enfermeras de sus colegas para discutir los
hallazgos y la falta de colaboración de los médicos, entre otras razones. Este último
punto es algo discutible ya que mi experiencia personal y profesional fue
exactamente contraria; tuve la suerte de cruzarme siempre con médicos que me
estimularon a que participara en ensayos y estudios clínicos e incluso apoyaron
mis proyectos de investigación aunque muchas veces carecieran de relevancia sus
posibles resultados pero si eran muy importantes para el estímulo de seguir
adelante. Obviamente no puedo negar que existen médicos que quizás no colaboran
con enfermería en este sentido y también he visto a otros que luego de que el
personal de enfermería le consiguiera datos, resultados de estudios e inclusive
rellenara formularios para un estudio clínico, al presentar los resultados en
una evento científico o ámbito académico se olvidara de al menos mencionarlos
como colaboradores.
El segundo grupo está constituido por los profesionales
de enfermería que realmente quieren llevar adelante proyectos de investigación
sobre algún tema relevante o en términos menos académicos podríamos decir
calientes, los cuales son rápidamente abortados porque no tienen o no logran el
acceso a la información necesaria, lo cual hace inviable el proyecto de
investigación.
Para construir una nueva identidad
profesional, menos denostada y más acorde con las exigencias de una sociedad
del bienestar que concibe la atención sanitaria de un modo más complejo,
holístico y sistémico, es preciso un cambio de la enfermería; y uno de esos
cambios es generar mayor evidencia científica a través de estudios de
investigación, lo cual incrementaría directamente la cantidad de publicaciones
y nuestra presencia en el Mundo Salud.
Conocer
las barreras y las dificultades que se presentan para llevar adelante proyectos
de investigación en Enfermería y generar así evidencia que apoye nuestra
práctica, nos ayuda a buscar estrategias para mejorar. Estrategias que nos
permitan superarlas "usando la persistencia y un plan que guíe el curso de
las acciones" (Logan, 2000), porque no es suficiente con conocer la mejor
forma de dar cuidado, si no somos capaces de implementarlo en la práctica
clínica y evaluar sus resultados (Lacasaña, 2004).
Creo
en una nueva Enfermería basada en evidencias científicas generada por
investigaciones científicas propias de Enfermería, como las muchas que existen
hoy en día y que no tienen nada que envidiarle a ninguna otra publicación
médica; y también creo que esa evidencia
científica debe estar acompañada por la mejor experiencia clínica de campo. Me niego
a dejar librada la atención de enfermería a un reducido algoritmo según el cual
se deben ejecutar ciertos pasos rutinarios para cumplir los objetivos planeados
o seguir ciegamente indicaciones médicas que a veces no se ajustan a la
realidad del paciente que tenemos enfrente.
Tenemos
capital humano, existe una producción de trabajo de investigación científica
realmente importante pero no todo lo que debería serlo, tenemos muchas
oportunidades, sólo debemos ponernos de acuerdo.
Hola soy Valeria; Enfermera hace muy poco tiempo y todavia estoy anonadada con el mundo de aplicaciones incumbencias de enfermeria y si.." sólo debemos ponernos de acuerdo".
ResponderEliminarLos anaqueles de las bibliotecas y ahora los bigs de los computadores están llenos de producción , sinembargo los referentes teóricos e investigativos no aparecen en el quehacer de la enfermería, de otra forma ya habríamos transformado esta sociedad, la salud y la profesión.
ResponderEliminarSon pocos los constructores de corpus teóricos originales, la mayoría con su investigación solo alcanzan a interpretar lo que han realizado sus anteriores. Ha predominado el indagar del pensamiento de los teóricos destacados, pensando en el autor y no con´èl.La mayoría de las investigaciones son descriptivas, me gustaría conocer las de los doctorados por aquello que expongo: la construcción de conocimiento y pensamiento. Gracias por tu entrega
Desde Colombia
ALBA LUCIA RAMIREZ R
BLOG: http://enfermeria-participacion.blogspot.com/